En 1969 Ferrari presentó dos de los biplazas más bonitos concebidos hasta la fecha: el Ferrari 212-E “Montagna” (reservado para competiciones en cuesta de la modalidad) y -ver imagen- el Ferrari 312-P (únicamente se construyeron tres prototipos) que dirimiría el Campeonato del Mundo de Marcas. En la fotografía (prolegómenos de las 6 Horas de Brands Hatch -Inglaterra, 1969- o, como puntualizan los ingleses, BOAC 500), el neozelandés Chris Amon y el mejicano Pedro Rodríguez (tocado, para no desentonar con el ambiente, con el típico sombrero de cazador de gamos que popularizó Sherlock Holmes) presentan la maravillosa “barchetta” que rezuma la elegancia de los diseñadores italianos por los cuatro costados. Y en sus entrañas la biplaza esconde un motor V12 de 3.0 litros (430 CV/9.800 r.p.m.), alimentación por inyección Lucas, caja manual de 5 velocidades y un peso total de 670 kilos. Pero el problema en Brands Hatch se llamó “Porsche 908″. Tres unidades oficiales del 908/02 conducidos por Jo Siffert-Brian Redman, Vic Elford-Richard Attwood y Gerhard Mitter-Udo Schütz ocupaban las primeras posiciones relegando al Ferrari de Amon-Rodríguez al 4º de la General… A final de temporada las tres unidades del 312-P serían vendidas a Luigi Chinetti, importador de la marca en USA.
Texto información Antonio De Leon Evora