Blanco angelical, inmaculada presentación y amedrantada presencia para sus contrincantes. Es el Chaparral-Chevy 2F americano (“Chaparral Cars Inc.”) diseñado por Jim Hall. Adapta un motor Chevrolet (“Chevy”, para los amigos) de 8 cilindros en V y una capacidad de 7.0 litros. Se alimenta por cuatro carburadores dobles Weber, alcanza los 525 CV/6.000 vueltas y pesa 790 kilos. El prototipo (en la imagen) compite en los 1.000 Kilómetros de Nürburgring (1967) por mediación de sus pilotos oficiales, Phil Hill y Mike Spence. En los entrenamientos oficiales conseguirán la primera posición al firmar un tiempo estratosférico (más tiempo volando/planeando tras coronar los cientos de rasantes del mítico circuito alemán) pero en la carrera definitiva se retiraban al destrozar la caja de cambios. Pese a todo, el Chaparral no tuvo nunca aires beatíficos y producía congojas y desasosiegos entre los ingenieros rivales que intentaron emular sus características vanguardistas de diseño, motorización y aerod
Texto información Antonio De Leon Evora