Una de las cuestas alemanas más prestigiosas es la de Friburg-Schauinsland, la clásica rampa que atrajo a los mejores especialistas de la Montaña. En su edición XXV (1964) fue puntuable para el Campeonato de Europa y, además, para el Campeonato del Mundo de Vehículos Sport. En la imagen, en Friburg-Schauinlsland (1964), el suizo Heinrich (Heini) Walter (1927-2009), tres veces Campeón de Europa en la modalidad: 1960 (Categoría Sport, sobre Porsche RS 60), 1961 (Porsche RSK 61, Categoría Sport) y -ver foto- 1964 (Porsche 904-GTS, Categoría Gran Turismos). Como piloto independiente pero con el apoyo directo, entre bastidores, de la firma Porsche, Heini Walter dispone del ligero Porsche 904 GTS provisto de un motor de 2.0 litros (4 cilindros bóxer) alimentado por doble carburación Weber que le garantizan 185 CV/7.200 vueltas para 635 kilos. En Friburg (11,2 km. de pronunciado desnivel). se clasificará 6º de la General (2º en G.T. 2.000 c.c.) tras Edgard Barth (Porsche 718 RS Spyder), el fogoso e imprevisible Franco Patria (Abarth-Simca 2000-GT) – pilotos titulares de sus respectivas marcas-, Herbert Müller y el Porsche 904/8 Special 2.0 de la Escudería Filipinetti, Bob Bondurant (Shelby Cobra Roadster V8 4.7) y Ludovico Scarfiotti (Ferrari 250-GTO V12 3.0)… Los monoplazas, entonces, no puntuaban para el certamen (en Friburg hubieran trastocado los resultados) y las clasificaciones generales se obtenían por la suma de los tiempos invertidos en las dos tentativas oficiales. Heini Walter estuvo toda su vida prácticamente ligada a Porsche a través de las competiciones de GT/Sport/Prototipos (llegó incluso a correr en Fórmula 1 en una ocasión) pero pasó a la historia como uno de los volantes más versátiles en la modalidad de la Montaña. Como cualquier piloto suizo que se precie.
Carrera de Vehículos Sport (-1.500 c.c.) perteneciente al Trofeo de Linz (1959) disputado en el circuito austríaco de Linz-Hörsching (25 vueltas a un trazado de 3,3 km.). En primer término, los Porsche 718-RSK 1.5 (145 CV/580 kilos) de Heini Walter (Nº 66) y Ernst Vogel (Nº 68), atrás, los Porsche 550-RS 1.5 (115 CV/590 kilos) de Milivoj Bozic (Nº 70) y Richard von Frankenberg (Nº 75)… Victoria de Frankenberg por delante de Vogel y Bozic… Walter se retiraba por problemas mecánicos (frenos).
Texto información Antonio De Leon Evora
Resultados de carrera
Fecha: 5 de Julio de 1959 Evento:Internationales Autorennen Flugplatz Linz. Circuito: Flugplatz Linz-Hörsching (Austria). Longitud: 3.300 metros. Salieron: 6
Unas rubias francesas de cuidado… La de la derecha es Martine Renier, que igual se adaptaba a máquinas de más de 300 CV o a un simple turismo de 130 CV. No fue la más prolífica y famosa de las conductoras galas de su generación pero su efímero palmarés lo consiguió de manera fulgurante hasta su desaparición de las competiciones. En 1973, con ocasión del Rallye de Montecarlo, copilotó a su compatriota Jean-Claude Lagniez (Alfa Romeo 2000-GTV), conductor que se acompañó en la edición anterior por la famosa nadadora y campeona olímpica “Kiki” Caron. Terminarían 26º de la General y 4º en Grupo 1. Martine llegó a disputar en dos ocasiones las 24 Horas de Le Mans sobre los apabullantes Porsche 911 Carrera RSR 3.0. En 1974, formando equipo con otra compañera, Anne-Charlotte Verney, y Pierre Mauray, se clasificaban 13º de la General (7º en GT) mientras que en 1976, con Thierry Perrier y Guy de Saint-Pierre, terminaban 18º Scratch (7º en Grupo 5). Prácticamente Martine Renier cuajó su palmarés deportivo sin ninguna tacha, viviéndolo intensamente y sin descartar modalidades, máquinas, potencias y tipo de pruebas. En la imagen, copilotada por su paisana la risueña Marie-Do Cousin, afrontan el demoledor XVIII Tour Auto de Francia (1973) sobre un Alfa Romeo 2000-GTV (Grupo 1, 130 CV), unidades numerosas y competitivas. En la clasificación Grand National lograban auparse en el 32º de la General (2º Equipos Femeninos)… Habíamos perdido el rastro de aquella valiente conductora francesa y que hoy, gracias a la fototeca de Dominique Guerreau, podemos deleitarnos en la bella imagen crepuscular.
Exhaustos, Vic Elford (anorak amarillo) y Kurt Ahrens (refrescándose) acaban de adjudicarse los 1.000 Kilómetros de Nürburgring (1970), prueba alemana valedera para el Campeonato del Mundo de Resistencia, sobre uno de los nuevos (pequeños gnomos terroríficos) Porsche 908/03, biplazas de 8 cilindros, 3.0 litros, inyección Bosch, 360 CV y 540 kilos ideales para el trazado germano. En Nürburgring se alineaban dos unidades para el equipo austríaco de la “Porsche-Salzburg” (los ganadores, más una segunda biplaza encomendada a Hans Herrmann-Richard Attwood, 2º de la General) más otras dos máquinas similares (las oficiales) pertenecientes a la “John Wyer Automolive Engineering” que acabarían retirándose: Jo Siffert-Brian Redman (presión de aceite) y Pedro Rodríguez-Leo Kinnunen (motor). Aunque en esencia, sin menoscabo, triunfo Porsche en el “Infierno Verde”.
Georg Loos, que formó equipo con Jürgen Barth, sonríe al término de la mítica carrera de resistencia. Bajo los colores de la “Gelo Racing Team” y el patrocinio de Shell, han conseguido el 10º lugar en la clasificación general y ser 2º en la Categoría de los G.T. (3.000 c.c.). La máquina del equipo alemán es una orfebrería de precisión: un Porsche 911 Carrera RSR dotado de un motor de 2.8 litros (310 CV/840 kilos). En Le Mans, como antiguamente sucedía, los cordones policiales apenas impedían el fervor entusiasta de los aficionados. Téngase en cuenta que en las décadas de los años 60 y 70. época de oro de los GT, Sport y Prototipos, los organizadores franceses tenían que coordinar la afluencia de más de 300.000 enfervorizados espectadores.